Tarea 3 _ Ensayo argumentativo _ Condiciones, comunicación y técnicas de la entrevista psicológica
Introducción
Objetivos
- ·
Comprender los conceptos,
las acciones previas a una entrevista psicológica y su importancia como
instrumento básico evaluativo.
- ·
Conocer las fases a
desarrollar para la implementación de una evaluación dimensional al sujeto.
- ·
Utilización de herramientas
para la entrevista psicología, que ayuden a contextualizar las problemáticas individuales
de un paciente.
Explorando el mundo de la entrevista psicológica
Perpiña, C,. (2012) expone que “La entrevista se constituye desde un punto básico cómo es el proceso general de evaluación psicológica en el cual se busca una conceptualización de un problema, la formulación de hipótesis, la selección y la definición de metas terapéuticas y la evaluación del progreso y seguimiento” (p, 244). Es bien sabido que la entrevista es una técnica compleja que trata de ser espontánea y natural, a pesar de ser planificada, que además presenta una interacción importante entre dos partes, y que mas bien, no incurre en una simple conversación amistosa sino en un medio utilizado para adquirir mayores conocimientos relacionados con los objetivos y finalidades propuestas en la entrevista psicológica. Como lo plantea (Perpiña, C., 2012), el entrevistador debe ser tan audaz que logre hacer que el entrevistado aporte las respuestas necesarias, para lograr alcanzar la finalidad propuesta, sintiéndose libre y confiado.
El manual de la entrevista psicológica nos brinda claridades conceptuales relevantes para la comprensión y dominio del tema; para comenzar con esta exploración se definirán los aspectos conceptuales de la entrevista, para Perpiña, C., (2012) La entrevista es una técnica de recogida de información, y por tanto de evaluación (…). Su versatilidad y flexibilidad permiten moldear una entrevista para cada finalidad y adaptarla incluso a las necesidades del entrevistado y al estilo personal del entrevistador, lo que le confiere gran ventaja respecto al resto de las técnicas de evaluación psicológica (p.23). Por ende la forma mas directa por la cual se puede llegar a la obtención de la información básica es con los cuestionamientos individuales al paciente que llega a consulta.
Para este fin hay diferentes clasificaciones de técnicas, dentro de ellas encontramos las que se basan en la entrevista; según Segal & Hersen (2010), citado por Perpiña (2012) la Estructura de la entrevista depende de la estandarización y especificación de los componentes, como que tipo y que secuencia de preguntas se van a implementar, el registro y la elaboración e incluso la interpretación de la información obtenida (p.30), por ende aquí se mencionarán algunos de los tipos de entrevista; No estructurada, es utilizada en forma general, no se tiene algo especifico, la misma conversación va dirigiendo los interrogantes y el tipo de preguntas a realizar, permitiendo el trato idiosincrásico al entrevistado, lo que quiere decir es en estas entrevistas no estructuradas, se permitir que el paciente o entrevistado sea el que vaya marcando la pauta y gracias al nivel de confianza que se le proporcione irá ampliando el nivel de información que lleve al entrevistador a lograr sus objetivos. Estructurada, es en la que encontramos preguntas cuyos resultados, pueden ser evaluados en un orden o formato (Escala Likert), que permite deducir frecuencia, duración o gravedad del caso planteado. Semiestructurada, poseen alguna estructuración, centrándose en temas específicos en las que el profesional pueda basarse para realizar las preguntas detalladas y correspondientes (p. 30).
Aunque se dice que las entrevistas estructuradas son las más apropiadas, también encontramos actuaciones que pueden llegar a ser contraproducentes como por ejemplo la rigidez en su aplicación y el no ofrecer un ambiente tranquilo y de confianza para el paciente, lo que es definitivo ante la aplicación de dichas entrevistas, es que el entrevistador debe estar perfectamente preparado para planificar la formulación de las preguntas, el estilo empleado, el campo de aplicación y establecer la función de la misma (Perpiña, C., 2012).
El entrevistador tiene la facultad de redirigir el enfoque de la misma sin que se cambie el objetivo central, teniendo como base lo anterior se conceptualizarán los términos de las entrevistas directas y no directas; (Perpiña, C., 2012) Directas, en este tipo de entrevistas se cuantifica el tiempo en el que el interlocutor habla, empleando el entrevistador el mayor tiempo posible en su intervención con el afán de elegir el tema, encauzar la entrevista y de formular las preguntas, para así obtener la mayor información posible que ayude a la creación de suposiciones para el direccionamiento a una evaluación e intervención oportuna, que ayude al paciente; No directivas, en esta entrevista es el contrario a la anterior pues el interlocutor es quien tiene libertad de expresión, gracias a que el entrevistador evita intervenir en el discurso, Perpiña, C., (2012) el objetivo primordial es ponerlo en contacto con su experiencia y con sus vivencias, evitando, por tanto, ofrecer el punto de vista del entrevistador o constreñir al entrevistado; pero, El objetivo inmediato de este estilo es crear un buen clima, la captación empática del entrevistado, al que se le ayuda a esclarecer su problema desde su propia posición (Ibáñez, 2010), citado por Perpiña, c., (2012), (p.33).
Es así como se observa que la entrevista clínica requiere de un proceso diferente a nivel de secuencia temporal. Algunas de las diferentes técnicas de la entrevista, que permiten individualizar la evaluación; las pruebas o cuestionarios que certifican realizar comparaciones. Por medio de la entrevista se logran analizar diferentes aspectos, generalmente de tipo verbal ya que hasta las pausas o silencios permiten descubrir parámetros o patrones de comunicación por parte de los entrevistados.
Para el buen desempeño de una entrevista se deben tener en cuenta los siguientes pasos: delimitación del tema y diseño del plan, entrevista a la persona correspondiente, transcripción de la entrevista, análisis de datos, verificación de resultados, información verbal o escrita, para ello se debe tener en cuenta los principios básicos éticos, como lo son el respeto, privacidad, confidencialidad, consentimiento informado, integridad en cuanto a límites profesionales, imparcialidad, honestidad, prudencia, sinceridad, protección de datos a todo nivel y nada de conflictos de intereses.
Durante el desarrollo de una entrevista psicológica se deben tener en cuenta condiciones transcendentales como son las técnicas apropiadas según el caso y el paciente, la preparación adecuada y oportuna de la entrevista, información previa, un espacio ambiental y personal conveniente, como lo menciona Hall (1.966) citado por Perpiña, C., (2012), la Proxemia (comunicación no verbal); recepción y lenguaje del entrevistado, registro de la información, grabaciones audiovisuales en lo posible, empatía, capacidad cognitiva, un correcto manejo del tiempo, establecer un buen rapport (clima de confianza), percibir al paciente tal y como es dependiendo de sus conductas verbales/no verbales y por último contener la angustia y ansiedad del entrevistado.
Un buen terapeuta debe tener presente los instrumentos que tiene a su alcance para llegar a utilizar en una evaluación psicológica, inicialmente para un psicólogo o profesional clínico, poder diagnosticar se debe iniciar con una caracterización del cliente o sujeto, posterior a ello, revisar cual es el motivo de la consulta mediante la descripción de su problemática personal, datos demográficos, ocupaciones, hipótesis de cual es el origen del problema, revisión de que si los síntomas son nuevos o si son repetitivos, su contexto o la posibilidad de que este sea el causante precipitante, se debe indagar en la historia clínica para tener el conocimiento de, si el paciente ha tenido anteriores tratamientos e intervenciones actualmente y cual es su rutina diaria.
En cuanto a las técnicas de las entrevistas podemos encontrar de diferentes tipos de preguntas, las cuales pueden ser abiertas que son aquellas que permiten que el entrevistado o paciente ahonde más en el tema dependiendo de su necesidad; y las preguntas cerradas que se limitan a respuestas concretas (si o no). Otra técnica es la del Eco, que consiste en repetir lo último que menciona el entrevistado a manera de pregunta para clarificar o especificar.
La técnica del role playing o simulaciones, es aquella que permite que el paciente se ponga en determinadas situaciones e imite lo que diría a la otra persona si estuviese ante dichas circunstancias. La de confrontación que es aquella que hace ver la contradicción o responsabilidad frente a un problema.
La llamada técnica de postura en la que, como su nombre lo indica, se tienen en cuenta aspectos corporales como por ejemplo el mirar al entrevistado, pero no en forma constante para darle importancia, pero no llegar a incomodarlo, (Perpiña, C., 2012). Todo lo anterior nos permite comprobar que una entrevista psicológica es “el arte de hacer reflexionar por medio de preguntas, para que el entrevistado tome decisiones lo más acertadas posibles” (Bedi, Williams y Davis- 2005).
(Fernández, B., 2013) El entrevistador debe estar muy bien preparado como para saber qué técnica aplicar, como dirigir y controlar los comportamientos verbales y no verbales, comprender la aplicación de las técnicas y sus condiciones adecuada con el fin de obtener los mejores resultados, pues cada persona es un mundo totalmente diferente; es por eso, que la comunicación es un método infalible para establecer una adecuada interacción entre dos partes o más y lograr entender los diferentes contextos psicológicos que se puedan presentar. Así mismo la entrevista psicológica es una herramienta importante ya que, sea cual sea la clase que se escoja, esta permite persuadir al entrevistado para lograr un acercamiento y brinda claridades más profundas sobre su situación. De esta manera podremos realizar una oportuna, digna evaluación que haga posible llegar a posibles soluciones a las problemáticas individuales e incluso a un ajuste diagnostico del paciente por medio del CIE o el DMS 5.
En cuanto al entrevistado, debe estar dispuesto a facilitar la información requerida por medio de respuestas, mediante la motivación de un ambiente de confianza en la evaluación y la eficiencia del entrevistador, el cual le da manejo de los recursos, refuerzos positivos, comportamientos empáticos. Fernández B, R. (2015) Esto quiere decir que la disposición del entrevistado para suministrar información no debe darse nunca por supuesta en términos absolutos; ni siquiera cuando se presupone una alta motivación para colaborar en la entrevista. Esta comprobado que cuando el entrevistado se encuentra con una alta motivación, suele producirse una gran cantidad de información y un aumento de la probabilidad de sesgos, voluntarios o involuntarios, entre las situaciones mas comunes en medio de una entrevista se podrían decir que son los falseos voluntarios, que ocurren con el fin de proteger algún dato, acontecimiento o comportamiento personal que el paciente considere incorrecto y que este le genere conflicto en desvelarlo o que le vaya a causar inconvenientes (Pp.181, 182).
Lo siguiente que puede ocurrir según Fernández, B, R., (2015), seria que en condiciones de baja motivación o, incluso, de rechazo de la situación de evaluación, el sesgo más frecuente es el negativismo, que, en grado extremo, puede llegar al mutismo absoluto, siendo el mutismo un trastorno de ansiedad, que hace que el individuo afectado por las circunstancias o su contexto, puede realmente enmudecer a pesar de poseer la habilidad de hablar; Por último, la tendencia a la aquiescencia o a contestar positivamente, en el caso de la entrevista, puede explicarse mejor por efecto de las exigencias de elaboración que por aspectos motivacionales (p.182), lo que quiere decir que el entrevistado puede tomar la actitud de afirmar todos para no tener que brindar ningún tipo de explicación pertinente ante alguna respuesta negativa dada, las preguntas deben depender de las preguntas planteadas para que las respuestas sean producto representativo de la complejidad de redacción y ajuste a su problemática.
Bibliografía
Fernández, B. R. (2013). Evaluación psicológica: conceptos, métodos y estudio de casos (2a. ed.). Madrid, ES: Larousse - Ediciones Pirámide. https://elibro-net.bibliotecavirtual.unad.edu.co/es/ereader/unad/49032
Perpiña, P. (2012). Manual de la entrevista psicológica: saber escuchar, saber preguntar. (2012). Madrid, ES: Larousse - Ediciones Pirámide.https://elibro-net.bibliotecavirtual.unad.edu.co/es/ereader/unad/49011
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